Informe asistencial: este tipo de informes psicológicos son de consulta y están relacionados con el diagnóstico y/o tratamiento de un paciente, pueden ser solicitados por el propio paciente o por vía judicial.
Informe de evaluación: pueden ser solicitados por el cliente en referencia a si mismo o alguien que depende de él, por vía judicial, o por el abogado para valorar posibles trastornos o incapacidades de sus defendidos (por ejemplo los informes de guarda y custodia, incapacitación, nulidad matrimonial, secuelas psicológicas, etc.). En función de si el informe apoya su linea de defensa o de acusación particular, el abogado decidirá si lo presenta, lo reserva, no lo presenta hasta el día del juicio, o lo utiliza para negociar si así lo decidieran las partes y el fiscal.
Informe pericial psicológico: también conocido como peritaje psicológico o dictamen psicológico, es el resultado de una amplia evaluación y valoración del comportamiento de la persona implicada en el proceso judicial, en el que el psicólogo forense expone sus resultados y conclusiones, para dar respuesta a una pregunta o planteamiento judicial de forma específica y clara. Puede ser solicitado por el juez, o por las partes de forma particular. En ocasiones es solicitado por el juez la fase de investigación para determinar circunstancias que puedan influir en la calificación y culpabilidad del delincuente en procesos penales.
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